Fotografía del Catálogo de Isance (sección de Danza Oriental).
La Danza del Vientre, una disciplina artística que se remonta más allá del Antiguo Egipto, ha pasado largos años desconocida hasta alcanzar una gran popularidad en Occidente, durante los últimos años. Al principio se extendió gracias a su exotismo, explotado en el mundo de la ficción y el cine; pero hoy en día es una actividad accesible a la mayoría, y ha ganado terreno gracias a su propio valor. En efecto, de las mujeres que entran en su mundo por curiosidad, una gran parte continua practicándola, encantada con este deporte. ¿Cuáles son los motivos, y qué es lo que esta disciplina artística aporta a la mujer?
El Corto-Documental “Danza! La Feminidad Consciente” es una fantástica respuesta a estas y otras cuestiones de las Danzas de Oriente.
Danza! La Feminidad Consciente.
Director: Nacho González.
Idea Original: Graziella Negri.
www.danzalafeminidadconsciente.blogspot.com
En Isance nos ha encantado “Danza! La Feminidad Consciente”, tanto a nivel de contenidos como por su magnífica realización. Os invitamos a verlo en calidad HDV (1440x1080).
Por nuestro lado, hemos tomado unas notas de resumen sobre lo que trasmite el documental y lo que ya conocíamos de la Danza del Vientre. Podéis verlas a continuación.
Se ignora a ciencia cierta cuál es el origen de la Danza del Vientre, aunque sí se estima que sus pasos empezaron en rituales dedicados a las diosas de la fertilidad y la feminidad; de ahí que recuerden en sus movimientos basados en el vientre, cadera y pelvis al universo del parto.
La llegada de las religiones monoteístas se ha estudiado en antropología como consecuencia del cambio de la estructura social y, especialmente, del rol de la mujer. La parte femenina quedó sometida a la masculina con el crecimiento de la estructura patriarcal, algo que también se reflejó en la crítica que las “nuevas” religiones hacen sobre la excesiva sexualidad de esta danza. La parte de mujer relacionada con la sensualidad y el arquetipo de Afrodita ha sido durante largo tiempo condenada socialmente.
Como mencionamos al principio, hasta el siglo XIX no llegó a expandirse realmente esta disciplina de la danza. La globalización hizo que se convirtiera en algo exótico y se demandara en Europa y el Nuevo Mundo. Gracias a ello salió a la luz de nuevo. Pero la Danza del Vientre es mucho más que un baile marcado por la sensualidad.
Para la mujer, se trata de una estimulación de sus canales energéticos que la conectan con la tierra. A su vez, fortalece las partes más características de la feminidad en el cuerpo, como la cadera, y le aportan igualmente confianza y seguridad en sí misma. También los movimientos del pecho suponen desbloqueos para las emociones, al abrir mejor la respiración, e incitan a la expresión.
Fuera de las consideraciones más espirituales y energéticas, es evidente que la práctica de la Danza del Vientre soluciona problemas físicos, por ejemplo, a nivel ginecológico y estomacal al activar toda el área. También recoloca la columna vertical, acostumbrando a un buen eje postural y una forma erguida de andar. Ayuda a fortalecer el suelo pélvico, previniendo los problemas como la pérdida de orina de la edad. Finalmente, tornea el cuerpo y reconecta con la sensualidad, sin importar la edad.
La Danza Oriental, al desbloquear las emociones, también despierta el lado creativo y da ánimos para encontrar un mundo fuera del estrés y las expectativas de la vida actual. Al disociar partes del cuerpo, supone reconocer zonas de las que ni se tenía constancia, y adquirir la capacidad de controlarlas de forma voluntaria a través de movimientos naturales y relajados basados en dejarse fluir.
La Danza del Vientre trabaja la autoaceptación y, por tanto, la autoestima. A la vez, libera endorfinas, conocida como la hormona de la felicidad, y aporta beneficios emocionales. Se recupera la frescura y la sensación de libertad.
En opinión de muchas y muchos, la Danza del Vientre forma parte hoy en día de una reconquista de la mujer, una lucha en contra de la demonización del cuerpo femenino y la sensualidad heredada del pensamiento medieval. Fuera del estereotipo de madre, ama de casa, trabajadora en traje de chaqueta… la mujer se encuentra de nuevo con su naturaleza, recupera un equilibrio físico, emocional y mental, y supera el estrés de una sociedad frenética.
Carmen Seva para ISANCE
Hola! soy Graziella, la creadora de la idea de Feminidad Consciente y guinista del documental que os recomiendan en esta entrada. Si quereis más información sobre el tema tengo colgado el trabajo de investigación completo en la pagina del documental Danza!Lafeminidadconsciente.com y en la que Nacho el director y yo nos basamos para realizar el corto. El trabajo contiene mucha información sobre los beneficios emocionales y físicos de esta danza paar la mujer actual. UN saludo Graziella.
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