Fotografía del catálogo de Isance (conjunto ref. 6 + 7) |
Hace poco preguntamos a nuestros seguidores de Facebook cuáles eran los temas que más os interesaba ver en los siguientes artículos de blog. A muchos os gusta que hablemos de todo un poco, pero también pedís más artículos sobre Fitness y Aerobic. Hoy os respondemos a eso con la historia del Fitness. ¿De dónde ha salido el término? ¿Cómo eran los entrenamientos en la historia? Eso y algunos asuntos más los hemos investigado para vosotros, con todo el cariño.
La palabra “Fitness”.
Como imaginaréis muchos de vosotros, “Fitness” es una palabra que viene de la lengua inglesa. No tiene una traducción literal, aunque es sencilla de explicar. Se compone de la raíz “fit”, que podría traducirse como “ajustado”. Eso sí, es un ajustado que más bien se refiere a dos cosas:
—A ser adecuado, tener las cualidades requeridas para algo.
—A estar en buena forma, en buen estado de salud.
Luego la terminación “ness” es la manera inglesa de construir un sustantivo. Por ejemplo: good es “bueno”, y “goodness” es “bondad”.
No os quejaréis, ¿eh? Además de hablaros de deporte, os damos pistas de inglés.
La cuestión es que, al decir “fitness”, nos referimos literalmente a algo así como a “ajuste físico” o “condición física”.
En cualquier caso, es una palabra que tiene connotaciones positivas. De hecho, hoy en día entendemos por fitness aquel “estado que permite a una persona usar su cuerpo en actividades que requieran fuerza, resistencia, flexibilidad, coordinación, agilidad, potencia, equilibrio, velocidad y precisión, sin experimentar fatiga”. Y así, el Fitness como actividad son todos aquellos deportes y ejercicios que nos permiten alcanzar dicho estado.
Hasta aquí con la definición, pasamos ahora al cómo empezó todo.