viernes, 9 de noviembre de 2012

Bailando sobre ruedas: un paseo por el patinaje artístico

No hace mucho que hemos empezado a recibir peticiones para hacer fundas de patines a medida. Aquí podéis ver un par de fundas lisas que tenemos en la tienda de Alicante.

A raíz de esto nos interesamos cada vez más por el patinaje, disciplina a la que no habíamos llegado todavía. Es un campo que nos parece precioso y que no destaca tanto como podría. Por eso queremos aprender más de ello y hemos inaugurado una sección en el blog dedicada al mismo.  Hoy la estrenamos, con un repaso a la historia del patinaje sobre ruedas.

Empezamos, cómo no, con una definición: “el patinaje artístico sobre ruedas es una disciplina deportiva de deslizamiento donde los deportistas compiten sobre patines, combinando elementos técnicos con facetas artísticas”. Bien, pues es además un deporte muy difícil porque hace falta estar bien preparado físicamente, tener equilibrio y mucha concentración.

Dentro del patinaje artístico hay además varias categorías: patinaje libre, figuras, danza, patinaje sincronizado, show y, desde principios del siglo XXI, in-line. Aquí, por cortesía de Wikipedia y Wikimedia Commons, hay unos segundos de cada una de las modalidades, para que podáis distinguirlas:


Pero… ¿cómo empezó todo?
Pues se cuenta que el primer inventor de los patines sobre ruedas fue un señor holandés llamado Hoans Brinker, y luego un belga llamado Jean-Joseph Merlin puso las cuatro ruedas en una sola línea. De todas formas, imaginad unos patines rústicos y de ruedas metálicas… frenar era todo un reto. Unos años más tarde, en Francia se introdujeron los patines en línea (llamados “patin de terre” o “patín de tierra”). Eso sí, hasta 1819 no se estableció la primera patente comercial del patín en línea, que tenía tres ruedas… y por esa misma época entró el patinaje en el ballet de «El pintor o los placeres invernales», para sustituir el patinaje sobre hielo.

Después de ello, durante todo el siglo XIX, empezaron a aparecer muchos modelos de patines, todos ellos en línea y con el problema de que no había quien tomara adecuadamente las curvas. El patín con dos ruedas a cada lado se lo debemos al estadounidense James Plimpton en 1863: con ruedas que pivotaban independientemente de la montura, luego rodamientos, ¡e incluso el bloque de goma para frenar! A partir de entonces sí pudo desarrollarse bien este arte. Y luego, ya en el siglo XX, se inventarían los primeros patines en línea apropiados para el patinaje.

Pero no nos vamos a enrollar demasiado con la historia, porque sabemos que en muchas veces da pereza cuando nos referimos al pasado en un mejunje de fechas. Mejor os dejamos una colección de cinco capítulos sobre el patinaje y su evolución, elaborados por el canal argentino de Patinaje Libre. Nos han gustado de verdad porque la realización es muy buena y porque se hacen muy dinámicos. ¡Hemos aprendido mucho!











Finalmente, si os interesa más sobre la historia del patinaje sobre ruedas, este artículo de la Federación Colombiana de Patinaje tiene más detalles y muchas fotos de los prototipos de patines que se han usado desde 1735. Curioso, ¿verdad?




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